martes, 30 de noviembre de 2010

"Poco a Poco..." con Diego Carrasco

LLegado el mes de Diciembre, nuestra sección " Poco a poco...." incorpora una nueva colaboración de un miembro de nuestra cuadrilla.En ésta ocasión le pedí a nuestro compañero de la primera trabajadera, Diego Carrasco, que compartiera con nosotros alguna reflexión desde su más profunda intimidad, relacionada con las próximas fechas navideñas y con su larga trayectoria como miembro de nuestra cuadrilla.Nuestro amigo Diego, desde su fidelidad y compromiso con el grupo humano que conformamos, ha tenido a bien poner palabras a su corazón.Desde aquí mi agradecimiento y mi alegría al saber de la rápida respuesta de cada uno de vosotros ( en éste caso particularmente de Diego ) cuando se os solicita.Desde éstas líneas, y en nombre del equipo de capataces y auxiliares de la cuadrilla del Stmo. Cristo de la Conversión, os deseo a todos que paséis unos días muy felices en compañía de vuestros amigos y familia, y que el Señor que tenemos la dicha de portar cada Viernes Santo, os conceda PAZ, SALUD y AMOR. José Vargas Spínola.

NO IMPORTA CUANTAS VECES CAEMOS... SINO LLEGAR A LA META

En nuestra vida son muchas veces las que caemos, muchas en las que nos cuesta levantarnos.. y en tan sólo algunas, nos ayudan a seguir adelante. Pero siempre, lo que importa, es llegar a la meta. Jesucristo cayó en su camino y muchos simplemente lo miraban, nadie le ayudaba, pero Él seguía hacia su destino, paso a paso, como nosotros hacemos no solamente en Semana Santa bajo nuestra trabajadera, sino en nuestro ir y venir del día a día.....Llegó un momento en el que una persona al verle acudió en su ayuda, pero Él nunca se paró en su camino... eso es lo que deberíamos hacer nosotros en cada momento, seguir siempre adelante…..seguro que en nuestro camino siempre habrá alguien que de alguna forma u otra nos ayude a levantarnos y a tirar hacia adelante .Aún así, siempre debemos recordar a los que no están junto a nosotros, a los que estando, necesitan de nuestras plegarias y amparo para que Dios los ilumine. Cuantas veces hemos notado el cansancio bajo nuestras trabajaderas y hemos buscado ese aliento que nos diera las fuerzas para levantar a nuestro Señor al Cielo…..ese mismo aliento es el que debemos de encontrar en nuestro caminar diario. En estas fechas, en las cuales nos acordamos de los que no están, en las que necesitamos más tener a gente querida a nuestro lado, y en las que ya nuestra mente empieza a soñar con el olor de ese azahar que pronto florecerá de una forma real..... En éstas fechas siempre complicadas, pero en las que debemos de mirar con una sonrisa hacia el cielo, son parte de nuestra Familia las personas que en cualquier día del año se han acordado de nosotros, las que nunca nos olvidan....las que aunque no estén junto a nosotros por la distancia, o porque llevemos caminos distintos, siempre están y estarán en nuestro corazón. Al llegar la Navidad nuestros corazones siempre se enternecen, y añoramos a los que ya no están en nuestras vidas; a unos se los llevó el Señor con Él, otros tomaron en su día otro camino... Os pido a todos una reflexión para que en éstas fechas tan cercanas que tenemos, miremos hacia dentro de nuestros corazones; que nos sentemos un ratito junto a nuestro Señor, y que le pidamos por los que algún día puedan necesitar de nuestra ayuda, aunque aún sean unos desconocidos para nosotros. Yo pediré por todos y cada uno de vosotros para que el próximo año os pueda ver a todos y podamos compartir nuestras alegrías y tristezas.....y no olvidéis que lo más importante no será lo bueno y lo malo que nos ha ocurrido en todo un año sin vernos,SINO QUE VOLVAMOS A ESTAR UN AÑO MÁS TODOS JUNTOS, y que podamos celebrarlo de una forma u otra.Os invito a todos a que en éstas fechas, y en cada momento que encontréis flaquezas, al igual que cada VIERNES SANTO , arrimemos todos el cuello y que sintamos en todo momento el apoyo del compañero, porque os aseguro que de ésto y solo ésto, saldrán las ganas, las fuerzas y la motivación para continuar andando, paso a paso, en nuestro camino del día a día.
Han pasado ya veintisiete años que la ilusión me ha hecho parte de la trabajadera, de ese zanco que el Viernes Santo ha conseguido que seamos dos elementos en uno. Cada cuál lleva su Semana Santa en su corazón.. ..ya sean uno, diez o veintisiete años…. En cada uno de ellos hemos vivido experiencias inolvidables, experiencias que se repiten y cada año son novedadosas, experiencias que han cobrado vida cuando se acerca nuestra Semana Mayor. SIN OLVIDAR LAS VECES QUE NOS HEMOS CAIDO NI LAS VECES QUE NOS HAN AYUDADO A LEVANTARNOS..... QUE POR FIN, ALGUN DIA, ALCANZAREMOS LA META TAN DESEADA POR NOSOTROS OS DESEO A TODOS UNAS NAVIDADES DONDE CRISTO OS ILUMINE COMO LO HA HECHO CONMIGO.

Diego Carrasco.Costalero de la cuadrilla del Stmo. Cristo de la Conversión ( Hdad. Montserrat)

jueves, 4 de noviembre de 2010

Nueva Sección "Poco a Poco..."

Después del paréntesis veraniego volvemos a estar en contacto, y renovamos el espacio de convivencia que nos ofrece éste blog. Con el fín de fomentar y engrandecer nuestros lazos de unión, se me ocurrió un día la idea de crear una sección que permitiera brindar nuestras reflexiones, nuestros pensamientos, nuestros gozos,...... nuestras luces y sombras al resto de compañeros de cuadrilla. Pensé en la posibilidad de que ésta sección tuviera una periodicidad determinada ( por ejemplo mensual ), y en la que poco a poco, todos tengamos la oportunidad de compartir lo que cada uno crea conveniente con sus compañeros " de abajo ".Para estrenar ésta sección, que he llamado " poco a poco....", tenemos un escríto de nuestro compañero de 8ª, Jesús Ramírez Castillero.Jesús, como él siempre hace, respondió rápidamente a mi llamada, y ha tenido a bién obsequiarnos con una reflexión profunda, a la que todos le sacaremos hasta la última gota de su jugo.Gracias Jesús por tu generosidad, y nunca olvides que juntos y con fé " moveremos las montañas ".

Un fuerte abrazo para todos de vuestro amigo y capataz.
José Vargas Spínola.

El Tiempo y La Fé

Llega un momento en la vida cuando el tiempo nos alcanza. Quiero decir que a partir de tal edad nos vemos sujetos al tiempo y obligados a contar con él, como si alguna colérica visión con espada centelleante nos arrojara del paraíso primero, donde todo hombre una vez ha vivido libre del aguijón de la muerte. ¡Años de niñez en que el tiempo no existe! Un día, unas horas son entonces cifra de la eternidad. ¿Cuántos siglos caben en las horas de un niño?
Éste párrafo de Luis Cernuda de su magnífico libro Ocnos, me sirve de prólogo para hacer una reflexión en torno a la vida y la fe.
Permitidme que os cuente una historia que ha ocurrido recientemente, a un gran amigo, casi hermano diría yo, le han diagnosticado un cáncer, Antonio, que así se llama, es compañero de este bendito vicio que es ser costalero, él fue, sobre finales de los 80, el que me metió en vena este veneno de las trabajaderas, y hasta hoy tengo la suerte de acompañarlo cada Lunes Santo portando a Nuestra Señora de la Salud.
El pasado jueves fue operado de urgencia, tras determinar los médicos que el tiempo era crucial. El golpe fue brutal, 44 años, tres hijos, toda una vida por delante y en un abrir y cerrar de ojos todo se derrumba, todo se viene abajo, todo se vuelve siniestro, las dudas en la fe aparecen inexorablemente en el horizonte. Pero la fuerza de nuestra creencia es grandísima, los primeros momentos son de zozobra, empero, nos agarramos con ahínco a la fe, a la familia y a los amigos. En estos tiempos en los que se promulga el laicismo y la falta de creencias religiosas, yo me rebelo ante esto.
El triángulo formado por fe, familia y amigos es el trípode donde apoyarnos. Antonio tiene todas las características que debe tener un buen costalero, humildad, responsabilidad, compañerismo, sacrificio, bonhomía, pero sobre todo Antonio es un hombre de fe y os puedo asegurar que este triángulo, sin prescindir de ninguno, es el que lo sustenta en estos momentos duros.
En la cabecera de su cama en el hospital está, entre otras, la imagen del Santísimo Cristo de la Conversión, allí apareció desde el primer momento y allí seguirá hasta que más pronto que tarde Antonio abandone el hospital camino de su casa para continuar su vida.
Las situaciones vividas estos últimos días me hacen demandar, más si cabe, la atención de Nuestro Señor, pero él sabrá entender mi egoísmo, el hombre es débil y en estos momentos yo lo soy especialmente.
La reflexión que quiero compartir con vosotros es muy simple, como bien decía Cernuda el tiempo es inexorable, el tiempo nos alcanza a todos, nadie sabe que nos deparará el futuro y noticias como esta que os cuento nos hace replantearnos la vida, pero lo que no cabe la menor duda es que Nuestro Señor y su Bendita Madre siempre estarán para servirnos de paño de lágrimas y de hombro donde apoyarnos, esto es una verdad irrefutable.

Jesús Ramirez Castillero

Costalero de la 8ª